Xylella fastidiosa

Xylella fastidiosa es una bacteria Gram negativa, crónica vascular y limitada al xilema. Fue descrita por primera vez en California en 1892.

Tiene más de 300 hospedantes tanto en monocotiledóneas como en dicotiledóneas. Produce graves daños en cultivos muy importantes, tales como cítricos, vid, almendros, melocotoneros, así como en numerosas especies ornamentales. Su presencia en las plantas es la responsable de diversas enfermedades de importancia económica para la producción agrícola: clorosis variegada de los cítricos, enfermedad de Pierce en la vid, Phony Peach en melocotonero, enanismo de la alfalfa y el quemado de hojas en otras especies leñosas.

Es uno de los principales patógenos de cuarentena en la Unión Europea, por lo que está incluida en la Directiva 2000/29/CE (traspuesta a la legislación nacional en el RD 58/2005).

Síntomas de Xylella fastidiosa. X. fastidiosa invade el xilema de la planta hospedadora. Su multiplicación en el interior de los vasos puede llevar a la obstrucción del flujo de savia bruta, principalmente agua y sales minerales.

  • Los síntomas varían de unos hospedantes a otros. En algunos casos, se corresponden con los síntomas típicos de estrés hídrico: marchitez o decaimiento generalizado; en casos más agudos, la seca de hojas y ramas, y, finalmente, la muerte de toda la planta. En otros casos, los síntomas se corresponden más a los provocados por ciertas deficiencias de minerales, como clorosis internervial o moteado en hojas.
  • El síntoma más característico es el quemado de la hoja o brotes. Una parte verde se seca de repente, volviéndose marrón mientras los tejidos adyacentes permanecen amarillos o rojos. La desecación se extiende con facilidad pudiendo ocasionar el marchitamiento total y la caída de la hoja.
  • Este tipo de síntomas también se pueden producir por otras causas no asociadas a ninguna plaga (agentes abióticos o medioambientales): estrés hídrico, viento, salinidad, exceso de nutrientes, etc.
  • La diferencia entre los síntomas producidos por estas causas y los ocasionados por la presencia de X. fastidiosa, radica en que cuando se deben a causas abióticas o medioambientales, el quemado de hojas suele ser generalizado, afectando tanto a las partes jóvenes como a las más viejas, y suele observarse en todas las plantas del mismo lote, puesto que se han desarrollado en las mismas condiciones.
  • En los brotes afectados en olivo también se ha observado un oscurecimiento de los vasos del xilema al realizar un corte transversal de los mismos.

Prevención. En materia de prevención se deben llevar a cabo buenas prácticas agrarias sobre la fertilización, el riego, la poda y gestión de restos de poda, así como sobre los vectores. Es fundamental comunicar inmediatamente a las autoridades competentes de su Comunidad Autónoma en materia de Sanidad Vegetal, cualquier sospecha de presencia de la bacteria.